Cuántos no nos preguntamos en esta vida, Todo Llega???? Como dicen por ahí…
Cuantas veces escuchamos esa frase: “No te preocupes, todo llega”…y cuantas veces no nos preguntamos ¿Pero cuándo? ¿Será cierto que todo llega?
Siempre soñamos con la llegada de algo que anhelamos mucho, que deseamos con inmenso frenesí. Vivimos en la espera idealizando nuestro sueño día a día, saboreando el sabor imaginario de nuestro sueño hecho realidad. A veces lo imaginamos con tal fuerza que se entremezclan realidad con imaginatividad.
En muchos momentos preguntamos a Dios cuando veremos nuestro sueño realizado. Este es otro de los momentos en que nos deprimimos al ver que pasa el tiempo y el tiempo, viendo como nuestras añoranzas pasan desapercibidas en este mundo.
Vemos sueños de otros cumplimos, la gente feliz mientras su dicha nos golpea en la cara y nuestro interior solo nos preguntamos: ¿Cuándo me tocará a mí?
La verdad, no es para lamentar, envidiar, tontos son los que pierden su tiempo celando dichas ajenas, pidiendo constantemente el cumplido de un sueño sin darnos cuenta de que nunca terminan. Los sueños siempre estarán ahí, siempre querremos más de lo tenemos y nunca tendremos todo lo que deseamos en esta vida. Muchos se van de este mundo sin tan siquiera haber logrado uno de sus más insignificantes sueños.
Por eso mientras esperamos pacientes que llegue nuestro turno, así tengamos que esperar un largo tiempo sin saber cuánto durará, viviendo con la duda si llegará o no llegará, que sea disfrutando cada minuto de nuestras vidas, al fin y al cabo como siempre le digo a mi mamá: “No podemos morir en la búsqueda del tesoro” así que a vivir cada instante al máximo y si llega o no llega como terminé en un artículo anterior, de eso se encargará la propia vida.